Un reciente caso en Batu Pahat ha destacado los peligros de las inversiones en línea no verificadas. Un jubilado de 64 años del sector privado fue estafado por una cantidad enorme que excedía los RM400,000 después de ser atraído a una falsa empresa de criptomonedas. Este desafortunado episodio comenzó con una interacción aparentemente inofensiva en Facebook en marzo, que rápidamente escaló a conversaciones en WhatsApp.
La víctima se encontró con la oportunidad de invertir en moneda digital a través de un sitio web fraudulento, «kakauet.com». Seducido por promesas de retornos significativos, el jubilado envió información personal al sitio y procedió a distribuir fondos a través de ocho cuentas bancarias diferentes de abril a junio.
A medida que la decepción progresaba, el hombre recibió notificaciones falsas alegando que su inversión había sido congelada por el Departamento del Tesoro de los EE. UU. Los estafadores tuvieron la audacia de exigir un 3% adicional del monto invertido para ‘desbloquear’ la cuenta. Afortunadamente, el jubilado reconoció estas demandas como posibles señales de estafa y, en consecuencia, se negó a cooperar más con las solicitudes fraudulentas.
Las autoridades encargadas de hacer cumplir la ley están investigando este caso, que sirve como un fuerte recordatorio de los peligros planteados al relacionarse con partes no confiables en el ámbito de las criptomonedas. La búsqueda de ganancias fáciles a menudo puede resultar en grandes pérdidas financieras y victimización por estafadores oportunistas.